por S. Ancín / foto: motogp.com

La segunda carrera de MotoGP sirvió para afianzar el liderato de Maverick Viñales y su imagen de favorito para este campeonato mundial. En el circuito de Termas de Río Hondo (Argentina) volvió a mostrar su superioridad sobre su Yamaha YZR M1, aunque también es cierto que se vio beneficiado por las caídas de sus competidores directos.

Desde 1990, ningún piloto de Yamaha había logrado ganar las dos primeras carreras del mundial. Y las estadísticas también dicen que, en más de un 83% de las ocasiones, el piloto que se ha impuesto en las dos primeras carreras de MotoGP ha acabado ganando el Mundial.

En esta segunda jornada, nuevamente Viñales salió desde atrás, desde la posición 6, y durante las primeras vueltas mantuvo la calma y fue recuperando posiciones. Como líder iba Marc Márquez, quien en la cuarta vuelta dejó en cabeza de carrera a Viñales, seguido por Crutchlow (LCR Honda) y Rossi (Movistar Yamaha Team). Ambos pilotos se disputaron la segunda posición y finalmente se impuso el italiano, que cruzó segundo la línea de meta delante del inglés.

Carrera accidentada

La sorpresa de la jornada la protagonizó Lorenzo, que salía 16 y en su afán de recuperar posiciones, se fue al suelo en la primera curva. También se quedaron por el camino Pedrosa, Dovizioso y Espargaró. Rins, que corría con una fractura en el pie derecho, también se cayó y, aunque pudo subir a la moto y continuar la carrera en última posición, finalmente tuvo que abandonar. Entre caídas y abandonos, solo terminaron la carrera 16 pilotos.

De la segunda carrera también destacó el papel de Zarco, quien esta vez sí terminó la carrera y demostró que puede dar guerra este campeonato. Salió desde la posición 14 y remontó hasta la quinta. Detrás acabó su compañero de equipo y debutante Folger. Y como se preveía, Abraham, que había conseguido el segundo mejor tiempo en los entrenamientos, no fue rival y acabó décimo.