Por H. Mayor – foto: f1.com | Con el Mundial de 2017 de Formula 1 a punto de decidirse en favor de Lewis Hamilton (muy probablemente este mismo fin de semana sea matemático), paralelamente la actividad fuera del asfalto sigue también su camino y, a día de hoy, se puede afirmar que la parrilla del año 2018 está prácticamente definida, y que el juego de cromos queda pospuesto a un horizonte que puede ser clave: 2019.

La renovación de Max Verstappen por Red Bull confirmada durante el pasado Gran Premio de Estados Unidos alumbra un Mundial el año próximo con los mismos protagonistas en la zona alta. Tras los movimientos de renovaciones pendientes de estos meses, Mercedes, Ferrari y Red Bull repetirán parejas en 2018. La cuarta escudería que mejor rendimiento está dando este año, Force India, también tiene atados contractualmente a Ocon y Checo Pérez; y dos clásicos que aspiran a dar un salto cualitativo como son Renault y McLaren, han cerrado también este capítulo. Los franceses con el movimiento de Carlos Sainz, ya desde este final de temporada para ayudar a Hulkenberg; los británicos convenciendo a Fernando Alonso para, al menos, acompañarles (junto con el joven Vandoorne) en su nueva etapa con motores Renault.

El Mundial del año próximo se parecerá, por tanto, mucho al actual en cuanto a pilotos. Las únicas novedades quedan ya sólo para Williams, donde lo lógico es que continuara Lance Stroll tras su debut este año y se supone que Massa podría dejar un asiento libre (Kubica y Di Resta como aspirante a sustituirle); y también en Toro Rosso, quizá la mayor incógnita. El cambio de motores a Honda y la salida ya materializada de Sainz deja todo abierto. Pierre Gasly está gustando y podría ocupar un asiento, mientras que es muy poco probable una renovación del defenestrado Kvyat. Haas ya ha confirmado a Grosjean y Magnussen, y Sauber es el otro equipo que puede alumbrar novedades.

El horizonte de 2019

Sin duda, todos los movimientos de este año, en cuanto a renovaciones y especialmente en su duración, se han encaminado a una fecha clave como es el Mundial de 2019. Ahí sí que gran parte de la parrilla finaliza contrato, y se esperan grandes movimientos.

Todo empieza por Mercedes, la gran dominadora de estos últimos años. Lewis Hamilton finaliza su contrato en 2018 y lo hará en el mejor momento de su carrera, y lo mismo ocurre con Valtteri Bottas, que hace unos meses se ganó su continuidad al año firmado esta temporada. En el caso de Lewis, no parece probable la no continuidad de una alianza de éxitos, y más cuando la principal alternativa (Ferrari) ha confirmado a su referente Vettel hasta el año 2021. Será en todo caso la gran operación de la temporada, y sin olvidar además que el asiento de Bottas volverá a estar en el mercado.

Ferrari por su parte sí se aseguró la continuidad de Vettel a largo plazo, pero el asiento de Raikkonen volverá a estar libre a finales de 2018, y posiblemente como uno de los caramelos del mercado, después de los últimos años discretos y la veteranía de Iceman. Aquí entra de lleno la situación de Daniel Ricciardo en Red Bull y un posible trasvase que se contempla como algo natural, más aún después de la renovación de Max Verstappen como apuesta a largo plazo por la escudería de las bebidas energéticas.

Otra pieza interesante en el mercado será la de Fernando Alonso. El bicampeón (y una de las grandes estrellas de la parrilla) ha dado un año más de plazo a McLaren para solucionar su desaguisado presente, con lo que la dinámica que se alcance desde Woking el año que viene será casi decisiva. Otro mal año de los británicos pondría al español a explorar alguna de las grandes plazas de la parrilla.

Otro de los focos de atención estará sin duda en Force India. Es una escudería en crecimiento y que ha dado un rendimiento excelente en los últimos años. A falta de saber hasta dónde le llevará su evolución en 2018, ahora mismo tanto Ocon como Pérez tienen un horizonte como agentes libres en 2019. Un equipo atractivo con los dos asientos libres y dos pilotos de nivel sin equipo. Misma situación para Renault, donde saben que el año próximo va a ser clave para el futuro; y por supuesto en Williams y Toro Rosso, con todo abierto hasta el punto de que este mismo año podrán condicionar sus fichajes.