Ocho meses después de su último éxito en Australia 2018, Maverick Viñales ha sumado la primera victoria de Yamaha en 2019 tras imponerse este domingo en el GP de Holanda MotoGP, novena escala del calendario. Mientras, Marc Márquez y el poleman Fabio Quartararo se han quedado con las restantes plazas del podio.

Dovizioso ha salvado los muebles con una trabajada cuarta posición, tras una intensa batalla con su compañero Danilo Petrucci, sexto. Entre las dos Ducati se ha colado la otra Yamaha satélite de Franco Morbidelli, quinto.

Lástima las caídas de Alex Rins, quien por fin partía desde la cima de la parrilla, y de Valentino Rossi,en el tercer domingo consecutivo del italiano sin puntuar.

En resumen, victoria merecidísima para un cuestionado Viñales, la cara hoy en el equipo oficial Yamaha frente a la cruz, Rossi. El de Figueras ha sabido extraer el máximo de las máquinas de Iwata, verdaderos misiles en los Países Bajos. Y de paso, se ha sacado la espina de España, donde Jorge Lorenzo le embistió, dejándole KO.

Otro de los grandes beneficiados con el resultado ha sido Márquez. En un territorio hostil para su rebelde RC213V ha sabido minimizar daños. Y no solo eso, sino que se marcha de Assen con 44 puntos más en la General que Dovi y 52 sobre su compañero en Ducati, Petrucci.

Éste se ha encaramado a la tercera posición de la tabla que ocupaba Álex Rins después de que el barcelonés se fuera al suelo en el GP de Holanda de MotoGP. Por ello, el de Suzuki ha caído al cuarto puesto con 7 unidades menos que el 6 de Borgo Panigale.

Rins toma el mando antes de caerse

Tras apagarse el semáforo, Alex Rins se ponía líder, seguido de un increíble Joan Mir. A escasos milímetros, el poleman Fabio Quartararo y de Maverick Viñales, que fiel a su tradición, perdía dos plazas en la arrancada. El de Rosas se ponía cuarto. Poco después cedía esa plaza en beneficio de Márquez.

Mientras, la táctica de Rins resultaba evidente. Tirar a tope y marcharse. Así lo estaba haciendo hasta que se caía en el segundo paso por meta. Quartararo heredaba su posición de privilegio.

Sin embargo, poco le duraba la alegría al francés del Petronas Yamaha. Inmediatamente tenía a su lado a Márquez, quien marcaba vuelta rápida. Batalla franco-española por la cima de la carrera.

Poco después Valentino Rossi besaba el asfalto en su tercer domingo seguido en blanco. Mala racha para el de Tavullia que no se sube a lo más alto del podio desde 2017.

El cuarteto ‘mágico’

21 giros antes de la conclusión se había conformado una manada de lobos compuesta por Quartararo, Márquez, Viñales. Dovizioso, después de firmar una gran remontada, y Mir.

Todo hacía indicar que Los cuatro magníficos se convertían en los elegidos para jugarse la gloria en La Catedral. No obstante Viñales perdía algo de terreno.

Los que no cedían nada, más bien todo lo contrario, eran Quartararo y Márquez. ¡Qué combate más espectacular mantenían ambos… hasta que el catalán dejaba atrás al galo!

Pero cuando restaban 15 vueltas para el final, el demonio francés le robaba la cabeza de la prueba al ilerdense. Algo más retrasados viajaban Viñales Dovi, tercero y cuarto, respectivamente. Cerraba el Top 5 Petrucci, por delante de Mir y Morbidelli.

La terna compuesta por el 20 del Petronas Yamaha, el 93 de Honda y el 12 del Yamaha oficial se escapaban del resto de rivales. Se atisbaba el duelo al sol en la tierra de los tulipanes.

Viñales, el más fuerte

A esas alturas de la guerra, Viñales, con el mejor ritmo de carrera del trío se convertía en una gran amenaza para sus compañeros de viaje. Así lo demostraba poco después devorando a Márquez y Quartararo. El de Rosas ya mandaba en el GP de Holanda MotoGP.

Por el contrario, el francés, a quien su Yamaha no paraba de darle sustos y trallazos, perdía comba con los dos españoles. A todas estas, Petrucci, cuarto, ya se había merendado a su compañero y jefe de filas, Dovi.

Duelo español

Inmersos en la guerra Márquez-Viñales, éste último se iba largo perdiendo la primera plaza a solo nueve vueltas para el desenlace. No obstante, la recuperaba casi inmediatamente. Dos pesos pesados catalanes en un combate épico. Talento puro, estrategia y gas a fondo, sin límites.

Pero si la cúspide de la prueba se había convertido en un caudrilátero de boxeo, algo similar sucedía unos metros más atrás. Sensacional Joan Mir. El compañero de Alex Rins en Suzuki escalaba a la ¡cuarta posición!, Para ello, había engullido a las Ducati de Dovi y Petrucci.

Pero Mir quería más. De hecho, se acercaba a Quartaro. ¿Y los gladiadores en la cima? Viñales exhibía un ritmo brutal, abriendo un hueco de medio segundo respecto a Marc.

También se había desatado la guerra civil en Borgo Panigale. Petrux con ganas de firmar la renovación para 2020, adelantaba a su líder, Dovi, para ponerse cuarto. Múltiples intercambios de posiciones entre ambos corredores italianos a lomos de sus Desmosedici. ¡Qué bonito!

Restaban dos vueltas para la bandera a cuadros a cuadros y la velocidad de su Yamaha catapultaba a Viñales camino del champán. Casi cinco segundos después entraba Márquez y rozando los 10 un brillante Quartaro. Dovi concluía cuarto, con Morbidelli, quinto, y su rebelde compañero Petrucci, sexto.

Imágesn del ‘GP de Holanda’: MotoGP.com & Yamaha.