El piloto de Mercedes, Lewis Hamilton, ha logrado su 93ª victoria, novena en 2020, tras imponerse en el GP de la Emilia Romaña F1, añadiendo así un nuevo circuito, el Autódromo Enzo e Dino Ferrari, en Ímola (Italia), a su abultado escenario de triunfos.

Por detrás del inglés que en la próxima cita en Turquía podría lograr su séptima corona si gana o es segundo, ha finalizado su compañero Valtteri Bottas. En tercera posición ha concluido un destacado Daniel Ricciardo, que ha sumado su segundo podio tras Eifel en los últimos tres Grandes Premios.

El de Perth se ha defendido en los instantes postreros de Daniil Kvyat (Alpha Tauri), que le acechaba con compuestos más frescos. Por cierto, el ‘aussie’ ya está cuarto en la General.

Con este nuevo doblete, la escudería de la estrella ha conquistado su séptimo título de Constructores consecutivo, estableciendo un nuevo récord en la Historia de la especialidad al superar los seis de Ferrari en la era Michael Schumacher.

Y hablando de los de Maranello, Charles Leclerc ha vuelto a salvar el honor de los italianos. El monegasco ha finalizado quinto un puesto por encima de Checo Pérez (Racing Point), otro de los destacados de la prueba en Bolonia. En esta ocasión, su compañero Sebastien Vettel se ha visto perjudicado por una parada en boxes muy lenta en la que ha perdido más de trece segundos y sus opciones de concluir en los puntos.

Sainz, séptimo

Respecto a Carlos Sainz, ha finalizado séptimo, mejorando en tres plazas la clasificación de la parrilla. Buena actuación del español que ha superado el obstáculo de arrancar con una estrategia peor respecto a sus adversarios. De hecho, el 55 ha sacado petróleo de su McLaren y se escapado por escasos milímetros de una colisión con el Red Bull de Alex Albon.

Además, se ha visto perjudicado por Kvyat, quien le ha frenado durante la carrera, a pesar de tener un menor ritmo que el líder de la formación de Woking. Al ver cómo el ruso terminaba cuarto, el 55 no se mostraba del todo satisfecho.

Podía haber acabado algo más arriba. No obstante, ha salvado los muebles en un trazado adverso para su montura naranja, que le han servido para situarse octavo a solo cuatro puntos de su compañero Norris, y uno  más que Albon.

Otros que han cuajado una gran cita han sido los chicos de Alfa Romeo. Kimi Raikkonen y Antonio Giovinazzi han celebrado su renovación con los de Hinwill para 2021 terminando ambos en los puntos por primera vez en el año.

Mientras, jornada aciaga para Red Bull. Max Verstappen, que partía tercero y llegó a situarse segundo, abandonaba por un ‘pinchazo’ en su RB16. Tampoco le fue mucho mejor a Alex Albon, quien protagonizaba  un trompo, perdiendo así opciones de sumar un buen puñado de puntos.

El anglo-tailandés concluía 15º tiene ya pie y medio fuera de la estructura de Milton Keynes. Algo similar se puede decir de Pierre Gasly. Los problemas en su Alpha Tauri le dejaron KO cuando rodaba cuarto en la primera parte del Emilia Romaña F1.

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Bottas mantiene la pole en la salida

Al apagarse las luces del semáforo, Valtteri Bottas ha mantenido -extrañamente- la primera plaza sin problemas, todo lo contrario que Lewis Hamilton. El británico se ha despistado en los metros iniciales, cediendo el segundo puesto en beneficio de un atento Max Verstappen.

La arrancada del 44 ha sido tan mala que ha estado a punto de perder también la tercera plaza, que mantuvo ante la amenaza del Alpha Tauri de Pierre Gasly. Sin embargo, el hexacampeón británico arrinconaba al francés contra el margen derecho del asfalto, quien perdía en ese lance la cuarta plaza desde la que arrancaba frente al Renault de Daniel Ricciardo.

En cuanto a Carlos Sainz, que partía décimo, no pudo adelantar a su compañero Lando Norris, quien le precedía en la novena plaza. Por detrás de ambos coches naranjas, en otra mala actuación de Sebastian Vettel, este se tocaba con el Haas de Magnussen.

Por cierto, ese incidente marcaría en cierta medida el destino de la prueba. Un fragmento del SF1000 del alemán se quedaba enganchado en el fondo plano del W11 de Bottas. Eso hacía que se dañara el coche del escandinavo,  comprometiendo el rendimiento de su monoplaza.

Otro de los grandes momentos del GP de la Emilia Romaña llegaba en el giro noveno cuando Gasly se retiraba por un problema en su AT01. Rodaba quinto. En las primeras diez vueltas, Bottas lideraba con 1,6 segundos sobre Max, similar distancia del neerlandés sobre Hamilton, tercero.

Ambos se distanciaban del cuarto, 15 segundos, con Ricciardo. Por cierto, tres vueltas antes Sainz había firmado una gran maniobra para dejar atrás a su compañero Norris para escalar a la novena plaza.

Bottas realiza un pit-stop y Hamilton, el overcut

Transcurridos diecinueve giros llegaba uno de los instantes clave del GP de la Emilia Romaña F1. Bottas realizaba su pit stop para montar los compuestos duros. Por el contrario, Hamilton realizaba una jugada maestra.

El 44 decidía  retrasar unas diez vueltas su parada en boxes y mantenerse en la pista. De ese modo, rodaría primero, sin ningún rival por delante y con aire limpio. Consciente de la trascendencia, comenzaba a marcar los parciales de morado.

Aunque en la pista las dos flechas negras estaban separadas con más de 29 segundos, pero como en el cambio de neumáticos se pierden unos 27 segundos, realmente Hamilton tenía a dos segundos al finlandés.

Una táctica errónea de Bottas

Incomprensiblemente Bottas se dedicaba a frenar a Verstappen, tercero. Es decir, Hamilton volaba mientras el nórdico perdía tiempo en una batalla con Max cuando su enemigo real era Lewis. Por ello, pocos giros después la distancia entre los dos bólidos alemanes se había reducido a un segundo.

Aunque el inglés rodaba primero, ya tenía en su punto de mira a Valtteri. Porque a pesar de que lideraba la prueba con unos 27- 28 segundos, ese era el tiempo justo necesario para realizar su pit-stop. Ya tenía el triunfo prácticamente en el bolsilo. No obstante, se ha de recoredar que el monoplaza del nórdico había perdido prestaciones al impactar con la pieza que se muestra a continuación.

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El safety car virtual cambió la carrera

Entonces se produjo un incidente que acabó de decantar la balanza en favor del hexacampeón inglés que estaba realizando una exhibición portentosa. Esteban Ocon se retiraba y se decretaba durante unos instantes un coche de seguridad virtual.

Ese tiempo fue aprovechado por Hamilton para realizar su paso por boxes. El británico regresaba a la acción primero y con 3,823 segundos sobre Bottas. Se había consumado el hachazo del corredor de Stevenage sobre el de Nastola.

Bottas perdió la primera y segunda plazas

Pero no acababan ahí las malas noticias para Bottas. Con el fondo plano de su W11 dañado, veía cómo Max se acercaba a su difusor. Especialista en devorar débiles presas, el neerlandés iniciaba una espectacular persecución sobre el escandinavo.

Y en la vuelta 43 sucedía lo inevitable. Verstappen superaba a Bottas para situarse segundo con un movimiento simplemente magistral, dado el complejo punto del trazado en el que lo ejecutaba.

Safety car: La locura

A partir de ese instante, la prueba se estabilizado con las tres plazas del champán teóricamente confirmadas. Pero, a nueve giros para el final del GP de la Emilia Romaña F1 daba un giro de 180º. Verstappen sufría un problema en el neumático trasero derecho que le dejaba fuera de combate.

Al quedarse varado en la grava, se desplegaba el coche de seguridad. Inmediatamente, Bottas pasaba por el garaje, precediendo a un ‘atasco’ en la calle de boxes con Sainz, Norris, Kvyat y otros adversarios.

Hamilton, líder de la prueba, emulaba a su compañero un giro más tarde. Pero un nuevo incidente cuando el safety car estaba a punto de abandonar la pista, le obligaba a mantenerse sobre el asfalto. George Russell se estrellaba contra el muro cuando trataba de calentar sus neumáticos y desperdiciaba una oportunidad única para terminar por primera vez entre los diez mejores.

El grupo de supervivientes se comprimía dando emoción a una resalida con solo cinco giros para el final. A partir de entonces, una carrera al sprint. En ella, Albon cedía ante la fuerza de Checo Pérez y sufría un trompo con su Red Bull para terminar decimoquinto en otro día para olvidar.

Obviamente, para entonces Hamilton ya había puesto rumbo a un triunfo inapelable, incluyendo la vuelta rápia. Tras él, un resignado Bottas, que ha tenido mala suerte de cara. Y cerrando el podio, un exultante Daniel Ricciardo.

Por su parte, Carlos Sainz escalaba tres posiciones para concluir séptimo, una plaza mejor que su compañero Lando Norris y una peor que un meritorio Pérez. Hoy el McLaren no daba para más. Buena actuación del madrileño.

Imágenes del GP de la Emilia Romaña F1: F1.com.