El lubricante es un producto con múltiples capacidades y funciones, pero entre ellas pocas veces se destaca la importancia que tiene en las transmisiones de los vehículos. En esta ocasión analizaremos las transmisiones manuales. Precisamente para estas, dada su singularidad, MatraX Lubricants cuenta con una gama de productos específicos: los MatraX Gear. De ellos, sobresalen especialmente MatraX Gear InfluX 75W90 TDL (100% tecnología sintética) y MatraX Gear Classic 80W90 TDL (mineral, de alto rendimiento).

¿Qué aporta un lubricante en las cajas de cambios manuales (e igualmente a los ejes)? Entre las ventajas está la suavidad que dan en el funcionamiento de la transmisión y reducción del ruido, unas cuestiones fácilmente detectables por el propio conductor. En el plano interno de la propia caja de cambios, tanto el Gear InfluX 75W90 TDL como el Gear Classic 80W90 TDL cuentan, entre sus cualidades, con la capacidad antidesgaste y extrema presión que protegen los componentes del fallo incluso bajo cargas elevadas.

Además, el hecho de ser lubricantes de calidad asegura a los distintos vehículos, ya sean coches, camiones, furgonetas, maquinaria de construcción y agrícola, largos intervalos de cambio, lo que conlleva una reducción de los costes de mantenimiento. Pero, su contribución a las transmisiones manuales va más allá, ya que uno de los aspectos más importantes es lo que se evita con un mantenimiento de dicho lubricante: evitar averías. Y es que si no se lleva a cabo el cambio de aceite de la transmisión el lubricante ‘sucio’ lleva los fragmentos a los engranajes, lo que puede causar problemas que van desde ruidos hasta dificultad para ejecutar el cambio de marchas y el desgaste de las partes por el contacto metal-metal.

Protección y universalidad en uso

Por otro lado, a través de los lubricantes MatraX Gear Influx 75W90 TDL y Classic 80W90 TDL se consigue prevenir la corrosión y la herrumbre, con lo que se protegen las distintas partes del sistema del agua y la humedad. Merced a ello, se alarga la vida de la transmisión y los ejes.

Pero si algo caracteriza a estos dos productos es su denominación TDL. ¿En qué consiste? Son aditivos de tecnología TDL (Total Drive Line), que constan de un aditivo mejorador del índice de viscosidad, con alta estabilidad a la cizalla (fragmentos metálicos), lo que alivia la «fatiga» sobre los dientes del engranaje. Otra de sus cualidades es precisamente la universalidad en uso, es decir, que con el mismo producto se lubrica tanto las partes fundamentales de la transmisión de la caja de cambios como las del eje.