por S. Ancín / foto: motogp.com

El campeón Marc Márquez volvió a reinar en su circuito talismán, las Américas (Austin, Texas), en el que ha subido al podio por quinto año consecutivo. Rossi quedó segundo (y se sitúa nuevo líder del Mundial) y Pedrosa tercero.

La tercera jornada de motoGP dejó claro que el Mundial está muy abierto tras la caída de Viñales, que arriesgó y se cayó al suelo en la segunda vuelta; la victoria de Márquez, que esta vez dejó su lado más agresivo, fue más cauteloso y le salió bien; y el tercer podio de Rossi, que a sus 39 años sigue demostrando que puede ser un buen candidato a llevarse la corona.

El fin de semana fue intenso. Si el viernes amaneció con 29º y una humedad del 53%, el sábado los pilotos despertaron con 16º y una humedad del 82%, lo que afectó al agarre de las motos en pista. Las condiciones meteorológicas y el mal asfalto del circuito estadounidense condicionaron la parrilla. En el primer libre hasta 10 pilotos se fueron al suelo (Márquez hasta en dos ocasiones). El peor parado fue el español Álex Rins, que se fracturó el cúbito y el radio y tiene para 6 o 7 semanas de baja (si no tiene problemas en su recuperación).

El arranque de Pedrosa

Pedrosa protagonizó una gran salida y se colocó primero, desde la segunda línea de parrilla, seguido de Márquez, Rossi, Viñales y Lorenzo, que fue superado en la primera vuelta por Zarco. El gran duelo esperando, Márquez-Viñales, se esfumó cuando “Mack” besó el asfalto, una caída inexplicable para nadie; primer error con Yamaha y que dice adiós a su gran inicio con esta escudería.

En la vuelta 13, el actual campeón, el único piloto de los favoritos que apostó por el compuesto duro en ambas ruedas, adelantó a Pedrosa y a falta de 7, la distancia era ya insalvable y tras la vuelta rápida, se fugó. Detrás, Zarco intentaba adelantar a Rossi y en uno de los intentos, el italiano se salió de pista y fue penalizado con 3 segundos a añadir en su tiempo final. A falta de dos vueltas, Rossi adelantó a Pedrosa, sacándole más de tres décimas. Il dottore no falló. Hay poco pilotos que sepan leer mejor las carreras que él y que se defiendan mejor en el cuerpo a cuerpo.

La gran remontada de la carrera la protagonizó Crutchlow, que desde la tercera línea, fue adelantando pilotos hasta jugarse el cuarto puesto con Zarco, que fue de más a menos. Aunque Lorenzo fue de menos a más, no acaba de solucionar los problemas con su Ducati y acabó noveno.