El deporte español se ha teñido de luto este jueves 28 de enero tras la muerte de Adrián Campos a los 60 años de edad, ex piloto de Fórmula 1, impulsor y manager de talentos como Fernando Alonso y propietario de la escudería de Fórmula 2, Campos Racing.

Así lo ha confirmado su propio equipo a través de un comunicado donde explica que “su corazón dejó de latir, pero su memoria será el motor que nos mantendrá  a todos luchando por seguir su legado”.

Su inesperada muerte por una súbita afección coronaria ha supuesto un durísimo mazazo para el mundo del motor en España, que llora su pérdida y reconoce la herencia de una figura fundamental dentro -y fuera- de nuestras fronteras.

Su etapa en la Fórmula 1: Minardi

Su andadura como piloto arrancó en el pasado siglo XX cuando dio sus primeros pasos en la F3 antes de dar el salto a la F3000. Fueron, precisamente, sus buenas actuaciones en este certamen las que abrieron las puertas de la Categoría Reina en 1987.

Así, transcurrida una década desde que Emilio de Villota se abriera paso en la Fórmula 1, Adrián Campos tomaba el testigo del madrileño. Apoyado por el respaldo económico de la firma de moda Lois logró que la formación de Giancarlo Minardi le convirtiera en el compañero de Alessandro Nannini.

Por culpa de la escasa fiabilidad del M187, solo vio la bandera a cuadros en el Gran Premio de España 1987 al finalizar decimocuarto. Uno de los momentos más emotivos para el deporte español llegaría en la siguiente campaña cuando coincidió con Luis Pérez-Sala en la escudería italiana.

Sin embargo, la dupla nacional se deshizo con la llegada de Pierluigi Martini tras disputarse las dos primeras carreras en Brasil y San Marino 1988. Tras abandonar el Gran Circo con 17 Grandes Prremios disputados, compitió en el Campeonato de España de Turismos y en las 24 Horas de Le Mans, en las que tomó la salida en su edición de 1997 con un Ferrari.

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Impulsor de jóvenes pilotos

Tiempo más tarde, se retiró para centrarse en una nueva labor que sería incluso más importante que la desarrollada en la pista: la búsqueda y promoción de jóvenes promesas. Derivada de esta incansable ocupación en los Campeonatos ‘Open Fortuna by Nissan’ y ‘Euro Open Movistar by Nissan’, descubriría el talento de un joven asturiano.

Dirigido por los sabios consejos de Adrián Campos, Fernando Alonso conquistó sus primeras victorias, las cuales, unidas a la hábil negociación del valenciano, le abrieron las puertas de la Fórmula 1 con su fichaje por Minardi.

No obstante, el legado de Adrián Campos no se reduce al descubrimiento del bicampeón asturiano de Fórmula 1. Otros grandes comatriotas como Antonio García, con una trayectoria espectacular en Estados Unidos, Marc Gené, quien siguió sus pasos en Minardi o el actual corredor catalán en la IndyCar Álex Palou, han estado bajo su manto protector. De hecho, el catalán con quien mantenía una gran amistad le visitó recientemente en la sede de Campos Racing.

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Un sueño inconcluso

Durante aquel encuentro con casi toda seguridad Campos y Gené conversaron sobre el salto del equipo a la máxima categoría del automovilismo. De hecho, ese movimiento ya se había sellado a finales de 2019 con los responsables del Gran Circo, pero quedó postergado por la pandemia del coronavirus.

Desgraciadamente su gran sueño no se ha materializado por culpa de un repentino problema en su corazón, ese que empleaba para llevar a cabo su labor relacionada con el mundo del motor.

No obstante, su legado permanecerá imperecedero. Y su figura siempre será recordada como un pionero que mostró el camino a las generaciones posteriores de pilotos, otorgándole a la Fórmula 1 un impulso y notoriedad desconocidos hasta entonces entre sus paisanos.

Por todo ello, representa una de sus figuras más influyentes y trascendentes en el desarrollo del deporte del motor, el cual no ha cesado de expresar las condolencias tras su desaparición.

Para finalizar, recalcar nuevamente que en el plano deportivo que logró hacerse un hueco en una especialidad y época en la que los corredores españoles carecían de espacio y popularidad en el Mundial. Su tesón y calidad al volante derribaron ese muro. Descanse en paz.