Este domingo se disputa el Gran Premio de Estados Unidos de Fórmula 1 2018, decimoctava escala del calendario, en el Circuito de Las Américas (COTA, por sus siglas en inglés) en Austin, Texas. Será la primera oportunidad de Lewis Hamilton para conquistar su quinto Mundial de la especialidad.

Por el contrario, Ferrari tratará de retrasar esa celebración con una victoria (improbable) de Sebastian Vettel. Mientras, los chicos de Red Bull (Daniel Ricciardo y Max Verstappen) estarán al acecho de italianos y alemanes para robarles alguna plaza del podio. Por su parte, Renault y Haas continuarán peleando por ser los mejores de la clase media.

En cuanto a los pilotos españoles, Fernando Alonso seguirá sufriendo con su McLaren y su amigo Carlos Sainz aspirará a arañar algún punto en el Gran Premio de Estados Unidos de Fórmula 1.

Hamilton, a 8 puntos de Fangio

Después de ganar las cuatro últimas carreras seguidas (Italia, Singapur, Rusia y Japón) y seis de las siete celebradas después del verano, Hamilton llega pletórico a uno de sus trazados favoritos en Austin.

El de Stevenage, muy inspirado y concentrado, cuenta en la tabla con 331 puntos, 67 por encima de Sebastian Vettel. Si Pitágoras no falla, solo necesita sumar 8 puntos más que el alemán de Ferrari para agrandar su impresionante palmarés. Por tanto son muchas las posibilidades de que Hamilton se proclame Campeón en Texas.

Y desde luego que sus números en el Gran Premio de Estados Unidos de Fórmula 1 no pueden serle más favorables. Desde que el asfalto tejano debutó en el Gran Circo en 2012, Hamilton se ha impuesto en cinco de las seis ediciones disputadas, las cuatro últimas de forma consecutiva. Tan solo se le escapó la de 2013, año que se llevó Sebastian Vettel con su imbatible Red Bull RB09.

Por si estos resultados fueran poco apabullantes, el 44 de Mercedes también se hizo con su tercer Mundial en el Gran Premio de Estados Unidos de Fórmula 1 2015. Por tanto, el COTA es territorio Hamilton.

Junto a las estadísticas y al impresionante estado de forma de Lewis, el gran rendimiento de su monoplaza constituye otro de los factores que le dan como favorito para el Gran Premio de Estados Unidos de Fórmula 1.

A esto se une el mencionado salto prestacional del Mercedes W09, que ha neutralizado y rebasado la superioridad que ostentó el Ferrari hasta el ecuador del curso.

Y todo ello sin olvidar la esencial labor de equipo que está realizando su compañero Valtteri Bottas. De hecho cuando lo requiere la situación, el escandinavo le cede el triunfo a su jefe de filas.

Hablando del finés de la formación de la estrella, éste seguirá combatiendo con su paisano Kimi Raikkonen (Ferrari) por el tercer puesto de la Clasificación de Pilotos.

Precisamente, La Scuderia ha aterrizado en Austin con el único objetivo de aguarle la fiesta a Hamilton y demorarla hasta México. Sin embargo, el pesimismo y la tensión que se viven en la formación de Maranello hacen poco probable una victoria de Sebastian Vettel. Su último triunfo en 2018 se produjo a finales de julio con motivo del Gran Premio de Bélgica, transcurridas ya cuatro carreras.

Un peldaño más abajo, Red Bull buscará su oportunidad una semana más. La formación energética esperará cualquier resbalón de italianos o germanos para pisar el cajón por décima vez en el año. Verstappen y Ricciardo quieren descorchar champán.

Los líderes de la mitad de la tabla, Renault y Haas, seguirán pugnando por la cuarta posición del Campeonato de Constructores, por encima de McLaren y Racing Point Force India.

Por último, se espera un nuevo capítulo en la encarnizada lucha en el Mundial de Pilotos por la séptima plaza. Esta posición designa al mejor corredor al margen de los tres equipos intocables: Mercedes, Ferrari y Red Bull.

Dicho grupo de aspirantes estará compuesto nuevamente en el Gran Premio de Estados Unidos de Fórmula 1 por Nico Hulkenberg (Renault), Sergio Pérez, recién renovado por Force India para 2019, y su todavía compañero Esteban Ocon, así como por Kevin Magnussen (Haas).

La ‘Armada Española’

Sensaciones dispares para nuestros compatriotas de cara al Gran Premio de Estados Unidos de Fórmula 1 2018. Tras terminar segundo en las Horas de Fuji del Mundial de Resistencia (WEC), Fernando Alonso regresa a su ‘vía crucis’ en la Categoría Reina.

El McLaren, lastrado por unas penosas prestaciones y la absoluta falta de evolución, impide aspirar al asturiano a posiciones destacables. Terminar entre los 10 más rápidos -algo que no ha logrado en las dos últimas carreras- parece misión imposible… si no llueve. Pero con el asturiano al volante, (casi) todo es posible.

Por el contrario, su paisano Carlos Sainz sí cuenta con opciones de puntuar. A pesar del evidente estancamiento en el ritmo de su Renault, el madrileño no desaprovechará ninguna oportunidad de mover el casillero.

Así lo demostró una vez más en el pasado Gran Premio de Japón, donde merced a su constancia y oficio rescató un meritorio punto. Repetir esa actuación resulta factible, quizás no tanto emular el séptimo puesto logrado en el Gran Premio de Estados Unidos de Fórmula 1 2017.

Imagen portada: Mercedes-AMG Petronas.

Imagen texto: Scuderia Ferrari.