Tras el arranque del Mundial el pasado domingo en Catar, el campeonato repite escenario este fin de semana (marzo 2-4). Tendrá lugar en el Circuito de Losail, que acogerá el GP de Doha. Allí en el desierto unos contendientes tratarán de prolongar sus buenas sensaciones anteriores, mientras que otros buscarán la revancha.

Entre los primeros se encuentra Yamaha. A pesar de competir en territorio Ducati, donde la fuerza italiana había vencido en las dos citas anteriores (2018 y 2019), los nipones derrotaron a los italianos. Si estos han superado los problemas de consumo de combustible que les lastraron, serán temibles.

Por tanto, se atisba aguarda un nuevo duelo entre ambas escuderías con nuevos invitados a la fiesta. No en vano, Suzuki, que se quedó fuera de las plazas de honor, aspirará a descorchar el champán.

Otro de los puntos de interés residirá en comprobar la progresión de Aprilia y el ‘Vía Crucis’ o la resurrección -en Semana Santa- de KTM.

Yamaha, a repetir triunfo

Puesto que el resto de máquinas no estuvieron a la altura, las M1 sólo brillaron en la prueba inaugural del certamen gracias a Maverick Viñales. El de Rosas se mostró imbatible, ayudado en gran medida por la puesta a punto del piloto de pruebas, Cal Crutchlow. No obstante, el gerundense sabe que lo tendrá difícil para doblegar nuevamente a las balas rojas.

Mientras, su compañero en el equipo oficial de los diapasones, Fabio Quartararo, espera mejorar el quinto puesto logrado en la ronda inaugural del campeonato. Afirma haber aprendido la lección y conocer lo que ha de hacer para descorchar el champán. Ya solo le falta ponerlo en práctica y que los rivales se lo permitan en el GP de Doha.

En cuanto a la escudería satélite, el Petronas Yamaha SRT, dispondrán de una gran oportunidad para quitarse el mal sabor de boca del GP de Catar. En esa cita, Valentino Rossi y Franco Morbidelli decepcionaron.

En su debut con la estructura malaya, el ‘46’ no pudo materializar la cuarta plaza desde la que partió, viendo la bandera a cuadros en decimosegunda posición. Se espera mucho más de una leyenda quien a sus 41 años tiene difícil subirse al primer peldaño del cajón.

Aún peor le fueron las cosas a su amigo.‘Morbydo’ sufrió un aparente problema en el dispositivo de salida ‘holeshot’, lo que le alejó de los puntos. Los dos colegas italianos estarán deseando resarcirse con una gran actuación que les sitúen en ‘posiciones de honor’.

Ducati quiere recuperar su feudo

Por su parte, las balas rojas aguardan el GP de Losail MotoGP con muchas ganas de venganza. Aunque fueron derrotadas por Yamaha, las GP21 demostraron un potencial.

Así, Johann Zarco (Pramac Racing) y ‘Pecco’ Bagnaia, (Ducati Team) ocuparon la segunda y tercera plazas del cajón, respectivamente. Como ejemplo de las prestaciones de las Desmosedici, el francés batió el récord de velocidad máxima con 362,4 km/h. Asimismo, el italiano sumó su primera pole en la Categoría Reina.

Por el contrario, el compañero de ‘Pecco’, Jack Miller, estará obligado a desquitarse del noveno puesto que cosechó en este escenario seis días atrás. Aunque llegó a formar parte del grupo de cabeza en los metros iniciales, fue perdiendo fuelle hasta caer a la novena plaza. En cuanto al vecino de box de Zarco, Jorge Martín, tendrá como misión mejorar el decimoquinto puesto anterior.

Su máquina y la espectacular salida que le situó cuarto antes de la primera curva el anterior domingo en Catar, le harán soñar con un buen resultado en el GP de Doha.

Suzuki, a por el podio en el GP de Doha

Pero si existe un equipo que buscará resarcirse en Losail, ése será Suzuki. La formación japonesa vio cómo el defensor de la corona, Joan Mir, perdía el podio en la recta de meta, a manos de Zarco y Bagnaia. Sin embargo, el mayor problema del campeón del mundo de 2020 estuvo en arrancar en décima posición.

En cuanto al otro puntal de la fuerza de Hamamatsu, Álex Rins, solo pudo ser sexto, tras un despiste con el ‘launch control’. Elevar sus prestaciones en clasificación y administrar correctamente sus compuestos, formarán parte del secreto para el éxito del ‘42’. El barcelonés debe dar un puñetazo en la mesa si no quiere ver aún más debilitada su posición en el equipo frente al joven mallorquín.

Honda, Pol Espargaró y poco más

Junto a las tres marcas anteriormente mencionadas que acapararon casi todo el protagonismo de la primera carrera del curso, otras jugaron un papel secundario. A la espera del regreso de Marc Márquez que antes de viajar a Portimao deberá superar otro examen médico, el Repsol-Honda volvió a quedarse lejos de los puestos altos.

Su nuevo piloto oficial, Pol Espargaró, está demostrando una gran capacidad de adaptación a la indómita RC213V. Sin embargo, su octavo puesto le supo a poco al catalán, quien se ha auto exigido mucho más.

Tres posiciones más abajo concluyó el sustituto del ‘93’, Stefan Bradl. El bagaje resultó peor para la segunda formación del ala dorada (LCR Honda) con las caídas de Álex Márquez y Takaaki Nakagami.

Aprilia, a seguir creciendo

Por el contrario, Aprilia confirmó gracias a Aleix Espargaró su salto prestacional mostrado en los test de pretemporada. El hermano de ‘Polyccio’ terminó justo por delante de este último, es decir, séptimo.

Y lo mejor de todo para la firma de Noale, que sueña con contar en sus filas con Andrea Dovizioso, es que Aleix pilotó con cierta cautela en la ronda inicial del certamen. Por tanto, la RS-GP cuenta con buena base para seguir creciendo.

Imágenes del Previo del GP de Doha: MotoGP.