Una de las grandes incógnitas para la temporada de Fórmula 1 que en breve empieza está sin duda en Francia. La histórica escudería Renault quiere volver a sonreír, a hacer cosas importantes en el asfalto. Superada ya la década (qué rápido pasa el tiempo) desde el mágico doblete con Fernando Alonso al volante, han sido años cuando menos turbulentos, incluido el abandono de la parrilla durante un lustro como equipo y un más que discreto precedente de la temporada pasada.

Este martes tuvo lugar la presentación de la nueva temporada para el Renault Sport F1 Team y su renovado RS17. Nuevos colores corporativos, el regreso al negro histórico y compaginado con un amarillo más suave que el último. Es la vestimenta de un monoplaza muy renovado respecto al anterior, más recogido, con menor distancia entre los ejes y una mayor carga aerodinámica. «El objetivo es acabar en quinta posición el Mundial de Constructores», anunciaba el presidente de Renault Sport Racing, Jerome Stoll. Toda una declaración de intenciones para un equipo que sólo sumó 8 puntos en todo 2016, únicamente por encima de Sauber y Manor, y apenas ofreció talento ni capacidad mecánica para competir en toda la temporada.

Hulkenberg… y Mapfre

Pero parece que soplan otros vientos en la factoría francesa. El reciente anuncio del patrocinio de Mapfre es otro importante impulso para una escudería que ha sido capaz de atar también a uno de los nombres más atractivos de la parrilla: el alemán Hulkenberg (noveno el año pasado con 72 puntos en Force India) reemplaza al irregular Magnussen y tendrá a su disposición un monoplaza al que muchos ya dan garantías de poder competir con los mejores.

La clave, indudablemente, será la nueva unidad de potencia que equipen los Renault. El trabajo de ingeniería ha sido intenso estos meses y el resultado es un motor con una arquitectura más cercana a Mercedes y que, decía el director técnico Bob Bell, «está más o menos a la altura de Ferrari». El rendimiento que pueda dar, junto con diferentes novedades técnicas, es lo que creen que permitirá el salto cualitativo en carrera y volver a crecer hacia la zona alta del Mundial.

Este lunes, con el comienzo de los entrenamientos, se empezarán a aclarar las incógnitas acerca de cuánto puede dar de sí el nuevo monoplaza que llevarán Hulkenberg y Joylon Palmer. En el horizonte, la nueva temporada.